¿YA NO TE SIENTES?... ¡YA!, NO TE SIENTES...MAS.
TENER LA
CABEZA TOMADA POR EL SEDENTARISMO ENFERMANTE
Cuando me
refiero a la pregunta ¿ya no te sientes? hago referencia
al sentirse que dan los sentimientos, al sentirse como una persona
en estabilidad, con el cuerpo y la mente actuando en conjunto
en aras de una delgadez saludable para el cuerpo y una tranquilidad
para la mente.
Cuando me
refiero a la frase ¡ya!, no te sientes...más, hago alusión
a no estar sentado físicamente en el día, más tiempo que lo requerido para ejercer los cuatro actos de
alimentación para nutrir a tú cuerpo, y me estoy refiriendo al mensaje que
te debes dar a ti, respecto a cómo actúa sin que te "des
cuenta" el sedentarismo enfermante en tú vida.
Ponte a pensar:
El ser humano (tú en este caso), estás diseñado por Dios para ser un SER en
movimiento constante, a excepción de las 7 horas mínimas que se requieren
para descansar, dormir y reponer las fuerzas. Por eso nuestro cuerpo tiene este
diseño anatómico desde hace miles de años, para poder
correr detrás de las presas hasta cansarlas y lograr el alimento para
cada día Es tan malo para la salud de una persona adulta el dormir menos de
siete horas como más de ocho y el dormir se lo debe realizar entre los horarios
que indica el ritmo circadiano de sueño. Quien duerme una sola hora más de lo
que realmente se necesita para descansar y restablecer las funciones
metabólicas del cuerpo, se pierde de vivir quince días en el año.
Lamentablemente
para la salud de cada persona, la actual sociedad de los excesos,
ha creado una forma de vivir en base al llamado "confort" que
nos ha hecho dejar de correr o al menos
caminar en busca de nuestros alimentos, no sólo eso, sino que por lo contrario,
hace que cada vez el ser humano pase más cantidad de alimentos, bebidas
azucaradas y/o alcohólicas por su boca (lo que yo denomino los “excesos de comidas
y bebidas”), sin darse cuenta que no son necesarios para la
correcta nutrición e hidratación de su cuerpo y utilice distintos elementos
tecnológicos como lo son los automóviles, los controles remotos o el servicio
de delivery entre otros, que dan como resultado, finalmente, un menor
movimiento del cuerpo humano, para realizar las tareas cotidianas del diario
vivir.
Pregúntate:
¿Cuántas de
las 17 horas restantes del día después de dormir lo suficiente, las pasas
estando de pie, caminando o realizando actividades que requieran movimiento
corporal?
¿Cuántas
horas por día le dedicas al cuidado de tu cuerpo, al menos caminando
simplemente?
Si la
respuesta es: ninguna, el pronóstico sobre tu salud futura no
es bueno...por decirlo de una manera suave.
A esta
situación yo la denomino TENER LA CABEZA TOMADA POR EL
SEDENTARISMO ENFERMANTE.
Tener la
cabeza tomada por el sedentarismo enfermante, es creer verdadera-mente (en
tu mente en forma verdadera), que a tú cuerpo nunca le va a pasar ninguna
consecuencia debido a la inmovilidad a que lo tienes sometido, producto del
sedentarismo enfermante. Esto ocurre porque la inmovilidad en demasía es
un exceso, y los excesos cuando se repiten constante-mente (en
la mente en forma constante) se transforman en adicciones, y
las adicciones - sin que te des cuenta - te llevan a pensar de una manera
errada, creyendo que estás pensando correcta-mente (con la
mente en forma correcta).
A esto yo le
llamo tener ideas erróneas en la cabeza.
Estas ideas erróneas
enquistadas en forma de hábitos negativos enfermantes, se pueden
modificar para que dejen de hacerte actuar de una manera que afecta tú salud,
solamente creando un nuevo hábito de vida saludable contrario y
positivo. Es imposible modificar o corregir un hábito en cualquier área de la
vida con sólo una idea o una motivación, lo único efectivo a largo plazo es
reemplazarlo por otro.
Frase para
reflexionar:
"Las
ideas, los intentos, las dietas y las motivaciones tienen fecha de vencimiento,
los hábitos no, tienen la fuerza de la historia". Richard Frenkel
Si todavía
crees que podrás salir por tus propios medios de la "arena
movediza" en que te tiene la inmovilidad del sedentarismo
enfermante, esa es una idea errónea. ¿O crees que si ya lo hubieras
podido hacer, no lo hubieras hecho?
De una adicción (el
sedentarismo es una adicción a la cama, a tu sillón favorito, al
automóvil o al no mover el cuerpo lo
suficiente, entre otras cosas) nunca se
sale sola/o, siempre se sale en compañía, pidiendo ayuda y aceptándola
humildemente.
Puede que
este, sea un buen comienzo como para empezar a alejarte del sedentarismo
enfermante. Con sólo un poco de ganas y un par de zapatillas o zapatos cómodos,
tienes todo por ganar.
No tengas
miedo de las personas con las cuales te vas a encontrar por los lugares donde
realices las caminatas, nadie te va a mirar ni juzgar diferente, somos
todos iguales a ti. Todos tenemos dos piernas igual que tú, la única
diferencia contigo es que sólo tomamos un poco antes, la decisión de
comenzar a caminar y de vivir nuestra vida mejor y saludablemente.
Reflexiona al respecto...y prepara el par
de zapatillas o los zapatos cómodos. (No hace falta ninguna ropa especial, sal
con el calzado de todos los días, una caminata no es un desfile de modelos).
¡Dale! ¡Tu cuerpo te está esperando!
Richard Frenkel - Life Coach - Escuela Internacional de Vida Saludable
Desde Israel: Tel. 058 447
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