LAS “ESTRUCDURAS” MENTALES

LAS “ESTRUCDURAS” MENTALES

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La palabra estrucdura está formada por la conjunción de las palabras estructura y dura.

En la palabra estrucdura - al verla escrita de ese modo – se puede visualizar perfectamente la unión de las dos palabras.

He creado la palabra estrucdura como una manera de definir a las estructuras mentales que tienen cierta rigidez, están arraigadas de tal manera en el pensamiento y causan problemas en áreas específicas que es difícil para las personas que las poseen, darse cuenta de que las tienen en su cabeza.

Las personas tienen la mayor parte de las estructuras mentales correctas y unas pocas estrucduras mentales incorrectas.

Reflexionemos con la siguiente frase:

“Las palabras condicionan los pensamientos, los pensamientos condicionan los sentimientos, los sentimientos condicionan las acciones y las acciones condicionan la vida de las personas. ¡Así como se escucha una palabra así se vive! Richard Frenkel

Si las palabras que escucharon, aprendieron e incorporaron las personas desde niños y que formaron parte en su educación, creando los hábitos de vida y las creencias fueron las correctas, no se distorsionaron y siguen siendo las correctas a través del paso de los años al seguir aplicando esas palabras continuamente hasta el presente, esas personas vivirán correctamente toda su vida - en el área de la vida donde actúen esas palabras- y nunca tendrán ningún problema.

Si las palabras que escucharon, aprendieron e incorporaron las personas desde niños y que formaron parte en su educación, creando los hábitos de vida y las creencias fueron las correctas, pero a través de los años se fueron distorsionando sin que las personas se dieran cuenta que eso ocurría, al aplicarlas a través del paso de los años esas personas  creerán que viven correctamente toda su vida - en el área de la vida donde esas palabras actúen - y vivirán toda la vida equivocada sin que se den cuenta que eso está pasando.

Las  estrucduras mentales aparecen en ciertas etapas de la vida de una persona y están formadas por una o varias ideas erróneas que se  repiten  constantemente. Estas ideas erróneas están formadas y sostenidas por el continuo uso de ciertas palabras y acciones repetitivas que fueron formando hábitos negativos.

A modo de ejemplo podemos decir que para que se pueda construir un edificio tradicional se requiere básicamente que el edificio esté edificado sobre un terreno y necesita para su construcción como materia básica cemento, cal, arena y ladrillos.

Una estrucdura mental está formada por palabras, ideas, acciones, costumbres y hábitos que continuamente se repiten de la misma manera.

Si a un edificio que ya está construido, aunque sea antisísmico, se le da vuelta el terreno al revés (la parte de abajo arriba y la parte de arriba para abajo) o directamente se cambia el terreno por otro, el edificio se derrumba, es imposible que pueda seguir sosteniendo su estructura si no tiene donde sustentarse.

En el caso de las estrucduras mentales el equivalente del terreno son las palabras. Una vez que se dieron vuelta las pocas palabras que sostienen a las estrucduras mentales, estas se derrumban en un instante porque no pueden seguir sosteniéndose, ya no tienen más la base de su sustento.

A modo de ejemplo vamos a reflexionar con la palabra necesito:

 

Preguntas para reflexionar:

 

¿Realmente lo necesito?

¿Qué es lo que realmente necesito para vivir todos los días?

¿Qué es lo que realmente necesita mi cuerpo para vivir todos los días?

¿Vivo realmente la vida que quiero vivir todos los días o vivo la vida que me impuso la sociedad que me condiciona a necesitar los excesos?

 

Idea errónea: ¡Necesito algo dulce!  ¡Necesito algo salado! ¡Necesito algo material... para poder vivir feliz!

 

Necesito: primera persona del singular presente, modo indicativo del verbo necesitar.

Significado del verbo necesitar: obligar, precisar o hacer algo.                    

 

La palabra necesito implica una necesidad en la propia construcción de la palabra. Como las palabras que escucho condicionan mis pensamientos, mis sentimientos, mis acciones y mi vida, al pensar en que necesito algo es imperioso que lo cumpla porque la palabra misma me está condicionando a hacerlo a partir de ese momento y lo más rápidamente posible.

 

Al reflexionar las personas podrán "darse cuenta" cuáles son las palabras que hay que cambiar para derrumbar al edificio de las estrucduras mentales. Estas palabras son las que están generando las ideas erróneas que llevan a no "darse cuenta" de las acciones que se realizan por accionar de acuerdo con las necesidades que generan esas palabras.

 

 La palabra "necesito". La reemplazamos por la palabra "requiere o requiero".

 

Cuando las personas se "dan cuenta" que, para vivir, sus cuerpos no "necesitan" de los excesos que lo dañan, se “dan cuenta” definitiva-mente (en la mente en forma definitiva) que sus cuerpos sólo "requieren" de agua pura y de los alimentos suficientes para nutrirse cada día.

 

Todo lo demás son ideas erróneas y estrucduras mentales impuestas por una sociedad de consumos excesivos - lo que yo denomino la "sociedad de los excesos"- donde en forma piramidal llegamos a que cada comercio minorista, se ha transformado en un "dealer" (vendedor) de excesos y productos adictivos que los cuerpos de ninguna manera requieren para vivir.

 

 

Richard Frenkel - Life Coach - Escuela Internacional de Vida Saludable

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