LLEGO EL
MOMENTO DE EXPRESAR EL IDIOMA DEL AMOR
CLAVES SOBRE
COMO REALIZARLO
CUANDO
LLEGUE EL MOMENTO
DESVIRTUANDO
IDEAS ERRÓNEAS
¡Cuando llegue el momento!,
le dije a mi madre a mis siete años, cuando me dijo que tenía que comenzar a
cuidarme porque estaba gordo.
¡Cuando llegue el momento!, me decía a mi mismo cuando era
adolescente y me di cuenta que, tenía que hacer algo para estar más delgado y
vivir mejor.
¡No es mi momento!, le contestaba a todos
mis familiares cuando fui adulto y me decían porqué no podía hacer algo para
estar delgado y realmente vivir mejor.
¡Cuando llegue el momento! contestaba yo
siempre, cuando alguien me preguntaba porque no comenzaba a resolver tal
problema que tenía en la vida.
...y el momento nunca llegaba, ni nunca llegó.
¿Cómo podía pensar yo de esa manera?
¿Cómo nadie me había explicado que los momentos nunca llegan? ¿Cómo
nadie me dijo anteriormente que frases estereotipadas, tales como "cuando
llegue mi momento" o "cuando llegue el momento“
o "no tengo momentos disponibles", eran frases que
condicionan a pensar de forma errada, creyendo que se está pensando correcta-mente
(en la mente en forma correcta) y se está pensando en forma equivocada
¿Cuál es la imagen que aparece en el preciso instante
en que digo "cuando
llegue el momento"?
¿Qué visualizo en mi mente cuando me digo:
el momento está llegando o se está acercando?
¿Cómo me imagino que es un
momento?, ¿quizás una máquina futurista al estilo de una película de
ciencia ficción con patas y brazos mecánicos?
¿Cómo es que se viene acercando el momento?, ¿por
aire, mar o tierra?
¿Tienen patas los momentos?, ¿Vienen en cajas y podré
comprar muchos?
Vamos a desvirtuar una idea errónea muy común, que
probablemente mantiene a la mayoría de las personas – entre las cuales puedes
estar tú que estás leyendo esta reflexión en este momento - en circuitos de
pensamientos, que no las dejan tomar las decisiones que tienen que tomar, porque
están a la espera de algo que nunca va a llegar.
¿Y qué es lo que nunca va a llegar?: LOS
MOMENTOS
...Y los momentos no van a llegar nunca, porque los
momentos son sólo tiempo, el o los momentos son una mera convención del
tiempo, los momentos no tienen vida, no
se arrastran, no caminan, no se deslizan hacia nosotros, los momentos son…¡
sólo unos simples momentos de tiempo!...y el tiempo no llega, ¿Por qué?, porque…¡el
tiempo siempre está! Todos los momentos de tiempo que hay, 24 horas al día de
cada día de nuestra vida, siempre están presentes en nuestra vida!
¡Date cuenta que los momentos no llegan!
¡Los momentos ya están dentro de ti o adentro nuestro!...y para utilizarlos
correcta-mente debo "darme cuenta" como se hace.
El "darse cuenta" es el
paso intermedio faltante, entre le entender
y la acción concreta. Debo dar un
giro de 180º en la manera de pensar e
ideas erróneas, que tengo en ciertas áreas de la vida.
Entonces las preguntas
que me debo hacer entre otras cosas. para reflexionar sobre este tema
son:
¿Es este mi momento? ¿Me doy cuenta que este es mi
momento? ¿Lo estoy aprovechando? ¿Si lo estoy aprovechando, hago lo que tengo
que hacer al 100%? ¿Cómo hago para que no se me escape, si el momento es el
arma preferida de las postergaciones, posposiciones y procrastinaciones
constantes en mi vida?
Frase para reflexionar:
"Una de las cosas más lindas que deseo
que me pasen en mi vida, es vivir con paz, calma, alivio y resolver todos los
temas de la vida en que tengo problemas, sin sentir que me privo de nada, sin
sentir restricciones, sin sentir angustias, faltas y nerviosismos y …sin que me
"de cuenta", me vaya "dando cuenta", de lo que ahora no me
estoy ”dando cuenta". Richard Frenkel
TU AMOR ES INCONDICIONAL
Tú que estás leyendo esto en este momento, ¡Eres amor! Tú eres un ser de amor. Tú eres amor puro. Esa es tú naturaleza. Por más que quieras no te puedes apartar de ella. Tú amor es incondicional... ¡Y seguramente tienes mucho amor para dar a tus semejantes! El amor nace en ti diariamente cada vez que te despiertas, a pesar de que tú sin darte cuenta lo reprimas y no lo dejes crecer. El amor se genera en ti espontáneamente todos los días en cantidades extraordinarias. El amor se multiplica dando amor. Cuanto más amor des, más amor vas a generar. Ama a tus semejantes, ama a todo el género humano y ámate primero a ti porque tú eres parte del mismo. A partir de allí amarás a todos los seres humanos indistintamente. Ama y dilo. El decirle a alguien ¡Te amo! te coloca en la realidad real de la vida misma. Disfruta de dar amor a cada momento del día y todos los días. El amor te mostrará el verdadero sentido de la vida. El amor te mostrará tú camino a una vida real, que esta sociedad esquiva y excedida, te la escamotea, birla o camufla a cada momento. El amor es vida y la vida es amor. De acuerdo a mi propia definición de vida, la vida es movimiento continuo, la vida son los deseos, ideas, pensamientos y sentimientos puestos en acción y el amor es la amalgama que une todo y a la vez el combustible inagotable que genera esos movimientos y esa puesta en acción. ¡Tú vida!, la única que vivirás en esta vida, está para vivirla y disfrutarla y no para existirla y sufrirla. Reflexiona con la siguiente frase que te escribí al efecto: “Recórrela siempre con cambio, la vida no tiene ni vueltos ni vuelta” o sea que todo lo que puedas y debas hacer, solamente lo podrás hacer en el camino de ida. Tú vida tendrá sentido dando amor y dejando que también te lo den, siendo permeable a recibirlo, dando tus conocimientos y dando tu experiencia de esa vida llena de amor a quien lo requiera. Ejercita el dar continuamente y eso te generará más ganas de dar. Usa el perdón cada vez que sientas alguna sensación de opresión en el pecho que te angustie, si esa opresión fue creada por otro y automáticamente esa sensación y esa angustia desaparecerán. El perdón libera a quién lo otorga. Como eres parte del género humano, te debes amar y sentir que tú te mereces la mejor de las vidas, con toda la salud y la suficiencia en todas las áreas de tú vida. Por eso en estos momentos deberías reflexionar sobre cómo expresar tu amor, tus experiencias, sentimientos y vivencias propias, porque al expresar y dar amor, una persona pasa a ser ex-presa y sale de la prisión de su propias inexpresiones. Reflexiona con las siguientes preguntas y pregúntate: ¿Para qué más? ¿Donde terminan los más, los muchos y los todos? ¿Cuáles son sus límites? ¿Hasta cuándo voy a seguir así? ¿Y por qué no? Los necesito, los muchos, los más y los excesos, te distorsionarán las expectativas y estás pasarán a ser “desmesuradas”. Todo lo anterior sólo está en el terreno de tu mente y te producirá - al no cumplirse - sentimientos de faltas momentáneas o carencias profundas constantes, que no te dejarán vivir feliz, en paz, con calma y alivio. Incorpora el concepto de la suficiencia. ¡Es el comodín de la vida! Donde lo apliques ganarás siempre. Con el concepto de la suficiencia incorporado, tendrás el 100% de todo lo que quieras a cada momento del día, en todas las áreas de la vida. Bebe la suficiente agua pura para hidratar al 70% de tu cuerpo, de a poco pero en forma constante durante todo el día. Nutre solamente al 30% de la materia orgánica de tu cuerpo, con la medida de lo suficiente de alimentos cada día, en cuatro actos de alimentación. Camina o moviliza a tu cuerpo de la manera que prefieras, lo suficiente cada día, con mucho amor... ¡Y a no parar de vivir saludablemente en base al amor y a la suficiencia!
Tú que estás leyendo esto en este momento, ¡Eres amor! Tú eres un ser de amor. Tú eres amor puro. Esa es tú naturaleza. Por más que quieras no te puedes apartar de ella. Tú amor es incondicional... ¡Y seguramente tienes mucho amor para dar a tus semejantes! El amor nace en ti diariamente cada vez que te despiertas, a pesar de que tú sin darte cuenta lo reprimas y no lo dejes crecer. El amor se genera en ti espontáneamente todos los días en cantidades extraordinarias. El amor se multiplica dando amor. Cuanto más amor des, más amor vas a generar. Ama a tus semejantes, ama a todo el género humano y ámate primero a ti porque tú eres parte del mismo. A partir de allí amarás a todos los seres humanos indistintamente. Ama y dilo. El decirle a alguien ¡Te amo! te coloca en la realidad real de la vida misma. Disfruta de dar amor a cada momento del día y todos los días. El amor te mostrará el verdadero sentido de la vida. El amor te mostrará tú camino a una vida real, que esta sociedad esquiva y excedida, te la escamotea, birla o camufla a cada momento. El amor es vida y la vida es amor. De acuerdo a mi propia definición de vida, la vida es movimiento continuo, la vida son los deseos, ideas, pensamientos y sentimientos puestos en acción y el amor es la amalgama que une todo y a la vez el combustible inagotable que genera esos movimientos y esa puesta en acción. ¡Tú vida!, la única que vivirás en esta vida, está para vivirla y disfrutarla y no para existirla y sufrirla. Reflexiona con la siguiente frase que te escribí al efecto: “Recórrela siempre con cambio, la vida no tiene ni vueltos ni vuelta” o sea que todo lo que puedas y debas hacer, solamente lo podrás hacer en el camino de ida. Tú vida tendrá sentido dando amor y dejando que también te lo den, siendo permeable a recibirlo, dando tus conocimientos y dando tu experiencia de esa vida llena de amor a quien lo requiera. Ejercita el dar continuamente y eso te generará más ganas de dar. Usa el perdón cada vez que sientas alguna sensación de opresión en el pecho que te angustie, si esa opresión fue creada por otro y automáticamente esa sensación y esa angustia desaparecerán. El perdón libera a quién lo otorga. Como eres parte del género humano, te debes amar y sentir que tú te mereces la mejor de las vidas, con toda la salud y la suficiencia en todas las áreas de tú vida. Por eso en estos momentos deberías reflexionar sobre cómo expresar tu amor, tus experiencias, sentimientos y vivencias propias, porque al expresar y dar amor, una persona pasa a ser ex-presa y sale de la prisión de su propias inexpresiones. Reflexiona con las siguientes preguntas y pregúntate: ¿Para qué más? ¿Donde terminan los más, los muchos y los todos? ¿Cuáles son sus límites? ¿Hasta cuándo voy a seguir así? ¿Y por qué no? Los necesito, los muchos, los más y los excesos, te distorsionarán las expectativas y estás pasarán a ser “desmesuradas”. Todo lo anterior sólo está en el terreno de tu mente y te producirá - al no cumplirse - sentimientos de faltas momentáneas o carencias profundas constantes, que no te dejarán vivir feliz, en paz, con calma y alivio. Incorpora el concepto de la suficiencia. ¡Es el comodín de la vida! Donde lo apliques ganarás siempre. Con el concepto de la suficiencia incorporado, tendrás el 100% de todo lo que quieras a cada momento del día, en todas las áreas de la vida. Bebe la suficiente agua pura para hidratar al 70% de tu cuerpo, de a poco pero en forma constante durante todo el día. Nutre solamente al 30% de la materia orgánica de tu cuerpo, con la medida de lo suficiente de alimentos cada día, en cuatro actos de alimentación. Camina o moviliza a tu cuerpo de la manera que prefieras, lo suficiente cada día, con mucho amor... ¡Y a no parar de vivir saludablemente en base al amor y a la suficiencia!
EL IDIOMA
UNIVERSAL DEL AMOR
Para reflexionar:
EL USO DE TU CORAZON
El corazón es amor en su más pura expresión. El corazón es la reserva que Dios nos dio, para actuar cuando la cabeza falla o directamente no funciona. El corazón siempre quiere hablar; ¡deja que se exprese!, no lo reprimas, escúchalo serenamente. La palabra es el modo que usa el corazón para expresarse. Cuando hablas desde el corazón, hablas con emoción y hablas para expresar amor en todas sus formas. El corazón puede hablar a través de tus palabras porque el amor está presente en él. Cuando hablas desde el corazón, hablas con la pureza del alma y desde la profundidad de tu ser. El corazón es la casa del amor. Cuando hablas desde el corazón, hablas el idioma universal que expresa la esencia misma de la vida de los seres humanos. Cuando hablas desde el corazón, hablas con el único idioma que deberías hablar siempre: el idioma de la verdad pura. Cuando hablas desde el corazón se derriban todas las mentiras. Cuando recibes con tú corazón los mensajes que son enviados desde otro corazón, nunca hay equivocaciones. Cuando hablan los corazones se descubren, se avergüenzan y huyen las hipocresías. La comunicación de corazón a corazón es directa y se llama amor…y ese amor es expresado por palabras, hechos y sentimientos. El verdadero amor entre las personas se establece de corazón a corazón, sin que intermedien las cabezas con ideas y pensamientos y mandatos preestablecidos. Las cabezas se equivocan, las cabezas no son confiables, las cabezas sirven para pensar, las cabezas mienten, las cabezas frenan los sentimientos puros de amor profundo, las cabezas son esquivas. Los corazones son puros y sinceros. De corazón a corazón no hay interrupciones ni dobles sentidos, los mensajes del corazón siempre llegan tal cual fueron enviados, se entienden, se sienten, te hacen vibrar, te hacen enamorarte y te hacen vivir con plenitud perfecta. Esa plenitud a la que todo ser humano debería aspirar: la plenitud de vivir la vida con felicidad y en un enamoramiento continuo con un ser amado.
Entonces la pregunta que queda pendiente
de tú propia respuesta, luego de reflexionar profundamente es:
¿Estoy con disposición a intentar hablar con
el idioma del amor, que es el único idioma que me va a dar felicidad y que ya
lo tengo adentro de mí? Richard Frenkel
Richard Frenkel –
Coach de vida
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