Si bien el sol es imprescindible para la vida, en ciertas ocasiones puede transformarse en tu peor enemigo.
¿Y…cuándo ocurre eso?
Tú pensarás que me referiré a la cantidad de sol que tomes y los peligros que pueda ocasionar en tu piel. Sin embargo no me refiero a eso, dicho tema voy a dejárselo a los especialistas dermatólogos.
Debido a mi experiencia como coach nutricional y de vida, por haber sido hiperobeso durante 27 años de mi vida y haber vivido año tras año la sensación que le produce a una persona el hecho de que se esté terminando el invierno, como ocurre en estos momentos en el hemisferio sur, es que me decidí a transmitirte que se pueden dar vuelta
ciertas sensaciones que son recurrentes cada año.
Los primeros rayos de sol primaverales comienzan a hacer subir la temperatura de los días y obligan a una persona que está con sobrepeso u obesidad ir descubriéndose de las prendas que la mantuvieron al abrigo del clima, pero sobre todo al abrigo de las miradas hacia ese cuerpo que no se quería mostrar.
Es en esos momentos que comienza una nueva sensación de impotencia ante un tema que se lo mantenía tapado por las prendas y tapado en el pensamiento.
No queda otra solución que descubrirse de la ropa de invierno que venía tapando el cuerpo ante la sensación de calor y eso produce una sensación no placentera de pudor, casi como que los demás van a descubrir el verdadero cuerpo que la persona porta en ese momento.
Esa es una sensación muy personal y vivida intensamente por quien le toca vivirla y en ciertas personas, es determinante del curso que llevará su vida los próximos meses, hasta que pueda volver a tapar nuevamente el cuerpo con ropas de abrigo al terminar el verano.
Generalmente, la mayoría de las personas que están con sobrepeso u obesidad, viven su estado con angustias por no poder resolverlo, ya sea hombres o mujeres optan por el uso de ropas con colores oscuros o directamente optan por el uso del color negro en la mayoría de sus vestimentas, programan actividades que no pasen por el uso del espacio exterior y al sol o directamente dejan de programarlas y se recluyen.
Mientras que la persona está dentro del circuito adictivo de los excesos de comidas y bebida, mientras tenga el cuerpo con sobrepeso u obesidad, y mientras que continúe pensando que el hacer una dieta restrictiva cada tanto le va a resolver el tema en forma definitiva; seguirá viviendo con esa sensación de frustración, continuará con el cuerpo excedido que no quiere tener y continuará cada vez que el sol comience a calentar, con esa sensación descripta a priori.
Si tú que estás leyendo en este momento, te identificas parcial o totalmente con esta situación, vives con continuos intentos de bajar de peso y no puedes resolverlo a través de todos los métodos, sistemas y dietas con los cuales has intentado previamente, te invito a que reflexiones profundamente para determinar si vas a seguir realizando los mismos intentos.
Si quieres recorrer el camino a la delgadez saludable, pero la acera por la que has venido caminando está llena de pozos que te hacen tropezar continuamente, lo más conveniente es que te cruces a la acera de enfrente que está totalmente lisa.
Si no quieres sentir más la sensación de no querer sacarte el abrigo de la ropa protectora de invierno y quieres ponerte el jean blanco que siempre quisiste, o elegir libremente (con la mente libre) todos los colores que la vida te brinda, te invito a que conozcas el programa de coaching de 16 semanas de duración, para el descenso de peso, bienestar, cambio de hábitos y estilo de vida bajo el Concepto de la Suficiencia. No más dietas restrictivas. En poco tiempo darás un giro de 180º en las ideas erróneas que mantienen a tu cuerpo con sobrepeso u obesidad.-
Richard Frenkel CPC
Nutritional and Life Coach.
Academy of Limits - Escuela de Vida Saludable. Bs. As. - Miami
martes, 13 de septiembre de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario